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28 de marzo de 2024

Los automóviles eléctricos

Automóvil eléctrico

(Extracto de Wikipedia)

Un automóvil eléctrico es un automóvil propulsado por uno o más motores eléctricos, usando energía eléctrica almacenada en baterías recargables. Los motores eléctricos proporcionan a los automóviles eléctricos un torque instantáneo, creando una aceleración fuerte y continua. Son también hasta tres veces más eficientes que un motor de combustión interna.

Los primeros coches eléctricos prácticos surgieron en la década de 1880.​ De hecho, los coches eléctricos fueron populares a finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, hasta que los avances en los motores de combustión interna, sobre todo con la introducción del dispositivo de arranque automáticos, y la producción en masa de coches de gasolina más baratos llevaron al declive el uso de coches eléctricos.



La recarga de un automóvil eléctrico puede requerir varias horas. Para recorridos de larga distancia, muchos coches permiten un modo de carga rápida que puede proporcionar un 80% de la carga en media hora, usando cargadores públicos.9​10​11​ Aunque el coste de las baterías está descendiendo rápidamente, todavía es alto, y debido a ello la mayor parte de los modelos tienen todavía una autonomía reducida y un mayor coste que los vehículos convencionales.

Con estos modelos los conductores también pueden experimentar ansiedad por falta de autonomía: el miedo a que las baterías se gasten antes de llegar a su destino.4​5​ También hay algunos modelos que ofrecen una gran autonomía como por ejemplo el Tesla Model S que tiene más de 500 km de autonomía.

Historia

(Extracto)

El coche eléctrico fue el primero de los automóviles que se desarrollaron, hasta el punto que existieron eléctricos anteriores al motor de cuatro tiempos sobre el que Diesel (motor diésel) y Otto (gasolina), basaron el automóvil actual. Entre 1832 y 1839 (el año exacto es incierto), el hombre de negocios escocés Robert Anderson, inventó el primer vehículo eléctrico puro.

El profesor Sibrandus Stratingh de Groninga, en los Países Bajos, diseñó y construyó con la ayuda de su asistente Christopher Becker vehículos eléctricos a escala reducida en 1835.

La mejora de la pila eléctrica, por parte de los franceses Gaston Planté en 1859 y Camille Faure en 1881, allanó el camino para los vehículos eléctricos. En la Exposición Mundial de 1867 en París, el inventor austríaco Franz Kravogl mostró un ciclo de dos ruedas con motor eléctrico.

Francia y Gran Bretaña fueron las primeras naciones que apoyaron el desarrollo generalizado de vehículos eléctricos. En noviembre de 1881 el inventor francés Gustave Trouvé demostró un automóvil de tres ruedas en la Exposición Internacional de la Electricidad de París.



Justo antes de 1900, antes de la preeminencia de los motores de combustión interna, los automóviles eléctricos realizaron registros de velocidad y distancia notables, entre los que destacan la ruptura de la barrera de los 100 km/h, de Camille Jenatzy el 29 de abril de 1899, que alcanzó una velocidad máxima de 105,88 km/h.

La introducción del sistema de arranque eléctrico del Cadillac en 1913 simplificó la tarea de arrancar el motor de combustión interna, que antes de esta mejora resultaba difícil y a veces peligroso. Esta innovación, junto con el sistema de producción en cadenas de montaje de forma masiva y relativamente barata implantado por Ford desde 1908 contribuyó a la caída del vehículo eléctrico. Además las mejoras se sucedieron a mayor velocidad en los vehículos de combustión interna que en los vehículos eléctricos.

A finales de 1930, la industria del automóvil eléctrico desapareció por completo, quedando relegada a algunas aplicaciones industriales muy concretas, como montacargas (introducidos en 1923 por Yale), toros elevadores de batería eléctrica, o más recientemente carros de golf eléctricos, con los primeros modelos de Lektra en 1954

Medio ambiente

Los automóviles eléctricos no producen contaminación atmosférica ni contaminación sonora en el lugar de uso.

También tienen el potencial de reducir la dependencia del petróleo si la electricidad que consumen es generada por fuentes renovables como centrales hidroeléctricas, energía eólica o paneles solares.



Además son mucho más eficientes que los de combustión ya que convierten un 80% de la energía proporcionada por un enchufe en mover las ruedas, mientras que los de combustión sólo convierten entre un 12% y un 30% de la energía del combustible en mover las ruedas.

Tesla Model S
Tesla Model S

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